¿Cuánto te conoces?

¿Cuándo fue la última vez que pensaste en ti?

Nos falta tiempo para parar el tiempo, valga la redundancia. Parar y pensar. Reflexionar sobre nosotr@s mism@s. ¿Cuándo fue la última vez que pensaste en ti? En lo que eres, en lo que haces, en lo que piensas. Hoy te propongo una actividad “2 en 1” de cosecha propia, para que puedas hacer un repaso de lo vivido y un análisis de ti mism@. De esta manera, dejamos por un día el darnos a conocer a los demás, y practicar así el autoconocimiento y la autorreflexión, que sin duda ayudará a optimizar la primera opción.

Primera actividad

Al ejercicio lo llamo “reloj de doble uso”, y no deja de ser una práctica emocional, ya que ayudará a sacar de dentro afuera tu esencia, para saber un poco más de ella, de ti. 

Necesitarás una cartulina grande de color blanco, aunque también se puede hacer versión hoja de papel, si te pilla en un momento improvisado. También sería bueno disponer de revistas que puedas recortar de diferente tipología (si estás en casa de mamá y papá o de los suegros no vale, que seguro que casi todas son del corazón, o igual no y soy un poco doña prejuicios), aunque si se te da bien el dibujo, es la mejor opción para complementar el material para el collage. También está la opción fotografías, aunque nunca he sido partidaria de recortarlas. Por último, lápiz, rotulador negro para repasar, regla, compás o algo con lo que puedas trazar una circunferencia, colores, tijeras, pegamento, y dos bolígrafos, azul y rojo. Vamos a ello.

Dibuja un reloj simple, usando el compás o algún objeto que te de la circunferencia ocupando la totalidad de la cartulina. Marca las 12 horas, escribiendo el número o no; esto último no es imprescindible. Ahora que tienes los 12 puntos, traza líneas rectas de manera que te queden 12 porciones o “quesitos”. 

Bien, una vez repasado el lápiz con el rotulador, empezamos la actividad de recordar. Se trata de pensar en tu vida, todo lo que ha ocurrido en ella y priorizar. Quédate con aquellos 12 momentos, acontecimientos, personas, cosas, lugares, etc., lo que sea. Se trata de dar visibilidad a 12 aspectos de tu pasado que te han marcado, ya sea para bien o para mal. 

Me explico. Por ejemplo, la muerte reciente de mi abuela fue un punto de inflexión en mi vida, porque era un apoyo muy grande para mí, un espejo dónde mirarme, y sigue siéndolo, pero ya no está físicamente, y eso marca, y duele en este caso. En cambio, el nacimiento reciente también de mi hija sería un punto importante positivo, el más importante de todos, por eso lo pondré en el número 1. Esta es otra variante, puedes usar los números para ordenar de más prioritario(1) a menos (12). Como queremos que el resultado sea totalmente visual, utiliza revistas, dibujos, fotografías,… si quieres para dar imagen a todos esos sucesos, y vas completando así las 12 franjas. 

Con este ejercicio estás, no sólo dando visibilidad a tus recuerdos usando la memoria, sino priorizando, dando valor a lo que has vivido y a aquello que te ha hecho ser quien eres. Estoy segura que esta práctica te hará aflorar infinitas emociones y sentimientos, algo indudablemente positivo. Por cierto, es muy recomendable una vez hayas experimentado la autorreflexión y saber cómo funciona, realizar el mismo ejercicio con tus hij@s, preferiblemente a partir de 7-8 años. Os llevaréis gratas sorpresas.

Segunda actividad

Completemos ahora este ejercicio de autoconocimiento

Da la vuelta a la cartulina y repasa de nuevo la circunferencia. Esta vez, divídela en 4 porciones: fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades (escríbelas afuera, al lado del cuadrante correspondiente), empezando por el cuadrante superior derecho y siguiendo las agujas del reloj. De esta manera, la mitad superior de la circunferencia se refiere a aspectos positivos y la inferior a aspectos a tener en cuenta para poner solución y mejorar. Por otro lado, la mitad derecha corresponde a un análisis más interno, ya que son factores que dependen exclusivamente de mí, son intrínsecos a mi persona, y la mitad izquierda a un análisis externo, en tanto que serán características que me influyen desde mi entorno hacia mi persona, no al revés. 

A estas alturas, much@s ya os habréis dado cuenta que se trata de un análisis DAFO; también llamado FODA o DOFA. Es una herramienta originaria de Estados Unidos, de los años 60-70, utilizada para conocer la situación real en que se encuentra una organización, una empresa o un proyecto, y planear una estrategia de futuro. A principios de este siglo se puso muy de moda en España; por lo menos, en el centro educativo dónde yo trabajaba la utilizamos varias veces, para conocer la situación real de la escuela y para conocernos a nosotros mismos. 

A continuación, os resumo cada uno de los cuadrantes y os pongo ejemplos, para que podáis realizar vuestra DAFO de una manera más fácil. En los cuadrantes puedes escribir palabras clave o frases cortas (escribe en azul en los cuadrantes superiores y en rojo en los inferiores). Mis ejemplos, en cursiva se refieren en este caso a un análisis de mi vida profesional. Tú puedes hacerlo del ámbito personal y/o profesional. Por supuesto, decir que mis atributos o características, clasificados como positivos pueden ser negativos para ti, y al revés; es subjetividad pura y dura.

Fortalezas: puntos fuertes de tu personalidad, habilidades y actitudes, ventajas. Perseverante.
Debilidades: puntos débiles de tu personalidad, desventajas, barreras internas. Impaciente.
Amenazas: situaciones negativas externas a ti, pero que te influyen desfavorablemente. Inestabilidad laboral.
Oportunidades: factores positivos que se dan en tu entorno y pueden ser aprovechados. Trabajo de lunes a viernes.

¿Qué vamos a conseguir con esta DAFO personal/profesional y casera? 

Que conozcas TU realidad, los factores positivos y negativos, internos y externos, que dependen directa o indirectamente de ti, y que intervienen en tu día a día para conseguir los objetivos que te propongas, optimizando así todos tus recursos. Te da una visión global y fidedigna de ti mism@, y te ayuda a ser consciente de tu potencial, así como de aquello que puede estar entorpeciendo lo que te propones. No cabe duda que, cuanto más se conoce un@ a si mism@, más posibilidades hay de llegar al objetivo.


Este post de hoy ha sido algo más práctico que los anteriores. De vez en cuando iré intercalando la práctica con la reflexión. Considero que es interesante hablar del concepto y contrastar ideas, pero mucho más importante es saber quiénes somos, para mostrarnos más seguros delante de los demás, así como para llegar a un equilibrio personal y emocional. Eso sí, os puedo asegurar que esta práctica no consigue milagros, pero sí acercarte mucho más a lo que te propones. En la vida, no todo es cuestión de suerte.

Comentarios

  1. Muy interesante esta entrada. Voy a probarlo. Aunque lo de las revistas y fotos va a ser complicado... como ya te dije, siempre me pregunto por que soy como soy (por que muchas veces no me gusto interiormente) y aunque este año me he revisado bastante, gracias a descubrimientos que he ido haciendo, sigo con cosas que odio de mi. Cuado lo tenga te cuento. Un abrazo y gracias por el cobtenido tan practico que nos das.

    ResponderEliminar
  2. Cosas que odias de ti... suena fuerte odiar, pero ya entiendo lo que quieres decir, algo que tú piensas que te limita o no te deja avanzar o mejorar, vamos, algo que consideras negativo. Has intentado darle la vuelto? Eso negativo seguro que es positivo en otras situaciones o igual, deberías potenciar lo positivo que seguro tienes muchas cosas y no obcecarte tanto en lo que odias. No sé... es interesante lo que planteas, igual le dedico una entrada más adelante. Muchas gracias por comentar y estar al otro lado!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

¡Estoy en Bloguers!