¿Qué ves?
Observando esta fotografía, podríamos hablar de soledad,
si eres de las personas que ven el vaso medio vacío, o de vida, si en cambio
casi siempre lo ves medio lleno, o incluso de belleza, o de muerte también. La
verdad es que la primera opción que os he escrito es la primera que me ha
sugerido la imagen, así que pensaréis que soy una pesimista en potencia, pero
nada más lejos de la realidad.
Soledad voluntaria
Soy optimista por naturaleza, pero vengo a reivindicar
con este post una palabra que no está muy bien vista socialmente, y que a mi
parecer se le da frecuentemente una connotación negativa. Igual por eso soy
considerada bicho raro, pero al igual que hay gente que no puede estar ni un
segundo sola, yo necesito mis momentos diarios de soledad, estar sola
físicamente, que no sentirme sola.
El momento de estar conmigo misma y conectar con mi interior es imprescindible y vital para mí; escucharme y reflexionar con mi propio yo. Por eso, cuando por trabajo tengo que ir por ejemplo varios días de colonias o convivencias con los críos, dónde lo que prima es la organización, horarios, rutinas y demás que ya sabéis, pero siempre acompañada, ya sea de alumnos o profes, echo en falta esos momentos de separarme de todo y de todos, y dedicarme unos minutos a mí, a pensar sólo en mí y nada más que en mí, sentir esa soledad, que para mí se traduce en paz y armonía conmigo misma. La necesito como el que necesita un café por la mañana para ser persona antes de empezar a trabajar (ahí también soy bicho raro, porque no lo necesito).
La RAE define soledad como la carencia voluntaria o involuntaria de compañía. Pues en mi caso, ya digo es totalmente voluntaria y necesaria.
El momento de estar conmigo misma y conectar con mi interior es imprescindible y vital para mí; escucharme y reflexionar con mi propio yo. Por eso, cuando por trabajo tengo que ir por ejemplo varios días de colonias o convivencias con los críos, dónde lo que prima es la organización, horarios, rutinas y demás que ya sabéis, pero siempre acompañada, ya sea de alumnos o profes, echo en falta esos momentos de separarme de todo y de todos, y dedicarme unos minutos a mí, a pensar sólo en mí y nada más que en mí, sentir esa soledad, que para mí se traduce en paz y armonía conmigo misma. La necesito como el que necesita un café por la mañana para ser persona antes de empezar a trabajar (ahí también soy bicho raro, porque no lo necesito).
La RAE define soledad como la carencia voluntaria o involuntaria de compañía. Pues en mi caso, ya digo es totalmente voluntaria y necesaria.
Relaciones virtuales y emociones
Y relacionado con el tema, ¿por qué actualmente nos
gusta tanto tener contactos y relaciones de todo tipo vía Facebook, Twitter o
Instagram, desconectando así de la realidad? Si os dais cuenta, preferimos
estar con nuestro móvil antes que quedar con muchas de esas personas
físicamente, ¿por qué? Y ahora ya voy más allá y a lo que me interesa, ¿dónde
quedan las emociones en este tipo de relaciones virtuales? No tengo la
experiencia suficiente para contestar a esta pregunta, pero pienso en las muchas
confusiones que se han dado en conversaciones que he tenido mediante WhatsApp
alguna vez, (los emoticonos no son suficientes aún para expresar el tono de lo
que se dice), y creo que al receptor no le llega la parte emotiva del mensaje
al 100%, ni siquiera al 60%.
Al principio de este post he comentado que la soledad no está bien vista socialmente, pero qué ironía, ¿verdad? Vivimos en una sociedad, entre otras muchas cosas, hipócrita a más no poder, pero de este tema me ocuparé en otro momento.
Al principio de este post he comentado que la soledad no está bien vista socialmente, pero qué ironía, ¿verdad? Vivimos en una sociedad, entre otras muchas cosas, hipócrita a más no poder, pero de este tema me ocuparé en otro momento.
La soledad y los niños
La soledad que está sintiendo esta bella flor entre
todas las marchitas de su alrededor puede llevar a diferentes opiniones según
se mire. Si le preguntásemos a un niño o a una niña: ¿cómo crees que se siente
esta flor? Seguramente, y por mi experiencia con niños de entre 3 y 12 años
durante 12 años, la mayoría contestarían que siente que está sola, porque las
demás han muerto y no tiene con quién hablar.
Pero recordemos que la emoción también se educa y que la inteligencia emocional se va desarrollando con los años. Se supone que llegados a la edad adulta, nuestra mochila de vivencias y los modelos que hemos ido recibiendo a lo largo de nuestra vida han influido en la construcción de nuestras emociones. Pero claro está, puede ser para bien o para mal. Aunque aquí ya entraríamos en otros aspectos morales y éticos, que me interesan mucho también, pero que hoy no toca.
Pero recordemos que la emoción también se educa y que la inteligencia emocional se va desarrollando con los años. Se supone que llegados a la edad adulta, nuestra mochila de vivencias y los modelos que hemos ido recibiendo a lo largo de nuestra vida han influido en la construcción de nuestras emociones. Pero claro está, puede ser para bien o para mal. Aunque aquí ya entraríamos en otros aspectos morales y éticos, que me interesan mucho también, pero que hoy no toca.
Continuamos con el probable discurso que me regalaría
un niño al ver esa flor sola, que no tiene a nadie con quién hablar. Una flor que habla,
sí. Para los niños las flores hablan, también el agua, los árboles, las
ardillas, incluso una pelota. Pero esta flor no tiene con quién hablar.
Curioso. Esa necesidad de hablar con alguien y no con uno mismo… ¿Por qué no
enseñar a los peques a hablar con ellos mismos, con su interior, con su pequeño
yo? Las emociones no sólo se aprenden con los demás. El mundo interior se
enriquece de una manera sobrenatural, y luego siempre puedes compartirlo, si
quieres, sacando lo mejor de ti, tu yo en esencia pura, una esencia madura que
ha ido pasando un proceso de autorreflexión.
Aquí lo dejo por hoy. Espero haberos hecho pensar
un poquitín sobre el tema y como siempre, me mantengo abierta al debate y a la discusión,
ya sea conmigo misma o con vosotr@s.
La soledad buscada es necesaria, disponer de tu momento, crecer internamente... quizás como en todo, un mal uso de ella, puede comportortar un problema. Suelo ver el vaso medio vacío, pero siempre intento rellenarlo rápidamente, y esos momentos de soledad, me ayudan a cambiar la visión del mismo.
ResponderEliminarFeliz semana y a disfrutar.
Estoy toyalmente de acuerdo, muy necesaria y positiva. Pues es una virtud ver el vaso medio vacío y saber rellenarlo 🙃 un abrazo y perdona por haberte contestado al cabo de un año 😅 se me pasó! 🤦🏼♀️
Eliminar