Miedo de antes, miedo de ahora

Empezamos la semana con muy buen pie, y es que lo hacemos de la mano de Lidia o @LiditaSwan. Lidia es de Cádiz y se define en Twitter como mamá y friki a partes iguales. He tenido la ocasión de colaborar en su blog, y en su momento ya hablé del corazón tan grande que tiene, y lo reitero, persona noble donde las haya. Os dejo ya con ella y su reflexión acerca del miedo. Disfrutadla.

Hace ya algún tiempo, mi querida @EmocionArte me pidió que si quería colaborar con su blog escribiendo lo que para mí implica el miedo, y el cambio y evolución que ha tenido desde que nací hasta ahora. Entre una cosa y otra, y por problemas personales he tenido el mundo blogger un poco olvidado, pero hoy era el momento de volver, así que desde mi punto de vista siempre, hoy os voy a hablar de miedos.

Se dice que cuando somos pequeños no tenemos miedo a nada, vivimos la vida como una aventura de dónde sacaremos los mejores momentos de nuestra vida, y en parte es real,  pero por desgracia, a medida que van pasando los años empezamos a verle el peligro a todo y con ello la aparición del miedo.

Recuerdo cuando sentí el miedo real,cuando sentía que me ahogaba por dentro y era como un abrazo oscuro de un ser que sólo transmitía dolor, agobio, angustia y frío, mucho frío. Fue a una corta edad, 7 años, y pensaréis que cómo me puedo acordar de ello, y es que fue un momento vital en mi vida que me marcó, y sucedió con la muerte de mi padre.

Ahí fue la primera vez que sentí miedo real y no le tenía miedo a la muerte en sí, ni a que mi padre ya no fuese a estar, sino al miedo de quedarme sola y que mi madre también muriese, y se fuese de mi lado. Recuerdo, que cuando tenía alguna percepción sobre algún peligro que pudiera provocarle a mi madre algún tipo de dolor, el miedo se apoderaba de mí llenando mi cabeza de pensamientos negativos, imaginándome situaciones que no eran reales, pero que yo sentía como si fuesen a ocurrir. El miedo a quedarme sin la persona más importante de mi vida, me paralizaba.

Ahora, aunque sigo teniendo ese miedo he sabido gestionarlo y con el paso del tiempo, las prioridades van cambiando. 

Desde que fui madre, la lista de los miedos se ha hecho infinita, todo me da miedo, a todo le veo peligro y ya no sólo tengo miedo a que a ella le pase algo, sino a que me pase a mí estando a cargo de ella, o simplemente a que me pase algo y no pueda verla crecer. 

El miedo es un sentimiento que llega y arrasa con todo. Cuando aparece en tu vida es capaz de destrozar las mayores de las ilusiones. El miedo a que algo salga mal es el que se ha encargado de destruir las mejores historias de amor, el miedo a ser quién eres ha hecho que millones de personas se escondan tras una careta y no hayan podido ser nunca felices. El miedo es ruin y traicionero, pero a la misma vez el que previene de situaciones que pueden ser dolorosas. Te hace ser cauteloso, provoca la sensación de no querer perder a algo o a alguien, y por ello le prestas más atención.

El miedo, como todo en su justa medida es bueno, y a los niños hay que enseñarles que dependiendo en qué situaciones, el miedo no es malo, pero sobretodo hay que hacerles ver que no hay que tener miedo a ser uno mismo, a luchar por la cosas, que si salen mal es porque es un aprendizaje pero que nunca se pueden quedar con la sensación de no haberlo hecho, es mejor arrepentirse de lo que has hecho que de lo que no has hecho. 

Hay que enseñarles que el tener miedo no es malo, que se puede tener miedo a situaciones o a personas, pero que no es un problema, el único problema es no enseñarles a gestionar esa parte de ellos que los hacen débiles, para que el día que les sorprenda puedan saber cómo actuar.

Comentarios

  1. Me encanta el giro final. Se puede tener miedo. Solo hay q enseñar a gestionarlo ;)

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    1. Totalmente de acuerdo contigo. Debemos aprender a gestionarlo y enseñar estrategias también a nuestros hijos... Gracias por pasarte por aquí y comentar!! Un abrazo!

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    2. Un placer !!! A veces los lumbagos t dejan leer un poquito más. Otro abrazo "apretao"

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    3. Aixxx no me hagas desearte lumbago para que vuelvas a comentar!! Jijiji un abrazo!!

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  2. ¡Toda la razón del mundo!Chapó por tu reflexión :)

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    1. Es un tema que nos preocupa a casi todo el mundo, no siempre es fácil aprender a vivir con él o gestionarlo de una manera que permita el bienestar de la persona de ntro de lo que cabe. Muchas gracias por tu comentario! Un abrazo!

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  3. bonito post, me alegro de leerte otra vez Lidia. cierto que con los hijos surgen muchos miedos nuevos pero al mismo tiempo nos hacemos más valientes. un beso a las dos

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    1. Muy valioso tu comentario, los miedos nos curten y nos fortalecen. Muchas gracias Marta. Se lo digo a Lidia. Un abrazo!

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