Libertad creadora en movimiento


Hasta ahora, en EmocionArte no me había atrevido aún con la arquitectura. Soy un poco, bastante cabezota y hace tiempo que me tienta escribir sobre esta grandísima obra de arte universal. ¡Qué menos que dedicarle un post! Son muchos años de admiración en directo y necesito expresar lo que siento ante tanta belleza, o al menos mostrárosla mediante la palabra. 


Dejadme que os cuente que las fotos que acompañan el post de hoy son regalo de una compañera especial de trabajo, que pudo visitar la Casa durante estas fiestas navideñas y veréis que tienen unas luces especiales, luces de fiesta. Las otras fotografías las tomé yo hace unos años, en una visita que organicé junto a mis padres. Si utilizáis cualquiera de estas fotos, por favor, mencionad la fuente, gracias.


Pura magia

La Casa Batlló es para mí, pura magia. Siempre que la observo, me sugiere conceptos, ideas muy ligadas a mis principios vitales, es por eso que me siento tan cerca de ella: alegría, libertad creadora, imaginación, fantasía, naturaleza, polémica en su época, espíritu creativo, también crítico. Seguro que podéis añadir alguna idea más, pero debéis saber que, aunque de siempre ha sido un edificio admirado, no es hasta 2005 que se reconoce formalmente como obra de arte (Patrimonio de la Humanidad de la Unesco), un poco increíble, ¿no?


¿Cuántas cosas sois capaces de hacer en tres años?

Yo personalmente, algunas, pero comparado con las que os diré a continuación, seguramente son pocas. En 1903, el Sr. Batlló, industrial textil compró una casa en l’Eixample. No una vivienda, sino una casa, repito. Y tampoco una casa cualquiera, una de las casas de la manzana de la discordia, ¡toma ya!; más adelante os explicaré mejor esto de la manzana discordante. Como decía, Josep Batlló compra un edificio entero en el mismísimo Paseo de Gracia, la avenida más emblemática de Barcelona.


Situémonos…

Veamos, vamos a situarnos un poco. Para los que no sois de la ciudad condal, aunque igual ya lo sabéis, porque existen los libros y también hace ya algún tiempo internet, a principios del siglo XIX, Barcelona vivió una explosión demográfica sin precedentes. La industria atrajo a miles de trabajadores. Así que, había que dotar la ciudad de viviendas. L’Eixample fue el proyecto urbanístico (1860-1890) llevado a cabo entre otras cosas para este particular cometido, por el ingeniero Sr. Cerdà.

¿Por qué la manzana de la discordia? 

En el Paseo de Gracia, entre las calles Aragón y Consejo de Ciento, la Casa Batlló tenía una brutal competencia artística modernista a derecha y a izquierda: Casa Lleó Morera, Casa Mulleras, Casa Bonet, Casa Amatller, … ¡A ver quién conseguía tener la casa más bella! 


Un no parar

Nos habíamos quedado en el 1903, cuando la Casa Batlló fue comprada para ser reformada; esa reforma tenía que superar o al menos igualar el arte de alrededor de la misma. Al año siguiente, 1904 Gaudí inicia la reforma que le ha sido encargada. En estas, el arquitecto ya estaba trabajando en la Sagrada Familia, y aún seguiría de ser inmortal. Bromas aparte, también trabajaba por esos años en el Parque Güell y en la Torre Bellesguard. Como veis, no importaba cuánto trabajo tuviera. En 1906, Antoni Gaudí acaba el encargo del Sr.Batlló, año en que también empieza La Pedrera o Casa Milà, también en Paseo de Gracia, aunque más arriba y a la derecha, como ya sabéis.


Antoni Gaudí

A Gaudí se le encargó la Casa Batlló en su mejor momento profesional, también coincidiendo con el modernismo, como arte transformador en ese momento en la ciudad de Barcelona. El arquitecto universal murió en el 1926, a los 74 años de edad, atropellado por un tranvía, pero nos ha dejado un estilo personal y expresivo en toda su obra. Fue tan renovador que, finalmente se despegó de los ideales modernistas e inspiró nuevas corrientes artísticas.

Os he querido poner un poco en situación, porque pienso que la ocasión lo merece, pero lo que realmente me apasiona contaros en el post de hoy es la parte estética de la Casa Batlló y sus múltiples interpretaciones. Por eso, a partir de ahora voy a centrarme en la fachada, en el interior, incluso en los muebles y por supuesto en la azotea.

¡Vamos allá!


Fachada de cuento

La fachada de la Casa Batlló parece un mar agitado, como el de los dibujos del japonés Hokusai, muy de moda en esa época. Pero la verdad, es que nuestra obra de hoy, ¡muestra tantas caras! Se ha dicho de los balcones que, pueden simbolizar tanto antifaces como calaveras, y que el remate, parece el espinazo de un animal. 

Así, tenemos varias interpretaciones de una misma apariencia, de un mismo lienzo. Por un lado, el suave oleaje del Mar Mediterráneo (parte frontal), por otro, en lo más alto, en el tejado la montaña de Montserrat, incluso una alegoría del Carnaval con las máscaras venecianas (balcones), o la Casa de los Huesos (forma ósea de las columnas de la Tribuna). Lo que sí parece ser es que hay, según los estudiosos una influencia vinculada a la obra de Claude Monet, las pinturas de nenúfares en el estanque, precedente del impresionismo escultórico.

Una obra de arte de fuerte personalidad

La presencia, la fachada, la carta de presentación, aquello que entra por primera vista de una persona, ¡es tan importante! Imaginaos, una primera impresión llena de movimiento, formas sinuosas, color a tutiplén, vida, alegría, imaginación, ingenio, fantasía, luz, … Aspirante contratado, ¿si o no? Todo ello conseguido con material diverso: piedra, vidrio, cerámica, hierro. Incluso, un elemento externo como es el sol, interpreta un papel increíble en ese juego de luces y sombras. ¡Es brillante!

Esta cara tan polifacética, este telón ondulante de 32 metros de alto y 14,5 de ancho está dividido en tres partes: una base de piedra, una parte central decorada con cerámica y vidrios de colores (trencadís) y una cubierta formada por coloridas tejas, también de cerámica, en forma de escamas. 

Vayamos por partes…

Tribuna: base de piedra

Con piedra arenisca de Montjuïc. Su decoración vegetal parecen plantas que broten de la piedra, una piedra que dibuja estructuras óseas (columnas), uniones entre huesos que recuerdan a los de los seres humanos (Casa de los Huesos). Los grandes ventanales han servido para darle también el nombre de: Casa de los Bostezos. Son continuas las referencias a lo natural, tanto al mundo vegetal como al animal; la parte superior de la tribuna recuerda a un gigantesco murciélago.


Trencadís

Es la técnica que consiste en la aplicación de fragmentos irregulares de cerámica u otros materiales, para cubrir una superficie. Muy utilizada por arquitectos modernistas. En este caso, tenemos 180m2 de trencadís, que se dice pronto. A parte de este trencadís, también se utilizó la técnica del collage, del ensamblaje, así como los campos de color, superficies orgánicas y formas generadoras de movimiento.

En cuanto a los discos de cerámica que adornan la fachada, si los contáis, hay 330 de 4 tamaños distintos, de 35cm, 27, 21 y los minis de 15cm. Fueron pintados a mano artesanalmente, para que el color fuera diferente en todas las piezas. Cada pieza era realizada en arcilla, se hacía una primera cocción, se aplicaba el color base de óxido natural y se volvía a hornear para endurecer el barniz.


Ventanas y balcones

Las 22 ventanas de la fachada principal son las encargadas de proporcionar más iluminación a las estancias. Los balcones, con forma de pergamino, máscara, calavera, flor,… se hicieron de hierro fundido para protegerlos de la oxidación, se pintaron con carbonato de plomo, por eso el color marfil. Si os fijáis en la base de los balcones, es de piedra tallada en forma de concha.

Dragón en lo alto

Y como no podía falta una interpretación de leyenda, en lo alto de la torre, corona una cruz de 4 brazos, como si de la espada victoriosa de Sant Jordi se tratara. Las 600 tejas de cerámica que conforman el tejado podrían recordar a las escamas de un dragón, el que mató el caballero, para salvar a la princesa. Esta versión la reforzaría el hecho de que la parte de la cruz (la espada) esta sobre la zona de tejas más rojizas (la sangre del dragón). En cualquier rincón aparecen motivos que recuerdan a la naturaleza, en este caso el remate de la cruz recuerda a una cabeza de ajo, ni más ni menos.


Y por último, recordemos el paralelismo en el tiempo de esta reforma junto al diseño y construcción del proyecto sublime y aún inacabado, la basílica de la Sagrada Familia. En la torre antes mencionada, encontramos los anagramas IHS (Jesús), M (María) más la corona ducal encima, y JHP (José); todos ellos forman parte de la Sagrada Familia.


Interior: belleza y funcionalidad no están reñidas

Nada es independiente de nada en la Casa Batlló, todo sigue una misma línea. Así, en el interior siguen las formas curvas y onduladas de la fantástica fachada, las formas orgánicas y que hacen referencia directa a la naturaleza, como por ejemplo el lucernario ubicado en el vestíbulo privado, que evoca la forma de un caparazón de tortuga, o también, los bancos con forma de seta.


Tal es la continuidad de fuera a dentro, o de dentro a fuera, como queráis verlo, que incluso el ascensor contiene aparte de madera, materiales utilizados también en el exterior, como el hierro o el vidrio. Esta línea continua, tanto en las viviendas, como en las diferentes estancias, interiores y exteriores, hacen de esta obra arquitectónica, una obra única, auténtica y original. Gaudí consiguió crear ambientes sugestivos, pero a la vez funcionales, llenos de arte desde las paredes, suelos, pasando por las escaleras hasta las sillas.


Uno de los objetivos principales a conseguir con la reforma era dotar de más luz y ventilación las viviendas, y se consiguió, ¡y tanto que se consiguió! El patio central fue ampliado, convirtiéndose así en el eje central de la casa. Pero, también ayudaron en el incremento de luz los azulejos utilizados en tono azul, simulando el fondo del mar; así tenemos el interior del edificio, ese patio central que puede simbolizar las entrañas marinas. Pero dentro de una misma tonalidad azul, Gaudí usó una variedad amplísima de azules, para precisamente, enriquecer espacios con el color, la luz y la intensidad: azul oscuro, oscuro medio, medio, medio claro, claro. De esta manera, lograba esa gradación que buscaba siempre para impregnar de naturalidad toda su obra.


Gran trabajo de ebanistería

En los muebles de nuestra gran obra arquitectónica de hoy, predomina la madera de roble barnizada, así como también en las puertas y ventanas, creando así una armonía natural en toda la casa. También bellos y funcionales, así son los muebles de la Casa Batlló. Parece mentira que estemos hablando de principios del siglo pasado, pero ya estamos viendo que Gaudí era un avanzado en su época. Aún hoy, cuesta a veces encontrar objetos funcionales y bellos, estéticamente hablando, en las tiendas.


¿Ejemplos de funcionalidad?

Sillas con orejeras para desplazarlas más fácilmente, bancos de dos o tres plazas, sillas unidas por los reposabrazos para motivar la vida social en las viviendas, asientos adaptados al cuerpo humano; en un primer momento, Gaudí quiso diseñar una silla adaptada al cuerpo de mujer y otra distinta para el de hombre, pero finalmente se creó un único modelo de silla, adaptada al ser humano, sin más.


Azotea: rincón de libertad expresiva

Creación de un universo en 300 m2, una obra de arte: ladrillo, trencadís, formas geométricas, chimeneas (27 chimeneas agrupadas en 4 grupos) que recuerdan al crecimiento grupal de ciertas plantas y setas. De nuevo, la presencia de elementos de la naturaleza. 


Estas chimeneas son muy características de Gaudí: en La Pedrera simulan guerreros, en el Parque Güell, setas solitarias, en el Palau Güell, chuches. En definitiva, un espacio exterior en el que el arquitecto dio rienda suelta de nuevo a su imaginación, a su libertad expresiva y a su creatividad en su punto más alto, nunca mejor dicho.


Para ir cerrando…

Quisiera aclarar, antes de terminar, que el post de hoy es fruto de documentación y no de imaginación o interpretaciones personales. He querido ser bastante rigurosa con una obra artística que me fascina y me tiene enamorada desde hace años. Y de las mil y una interpretaciones que se han hecho tanto de ella, como de los diferentes elementos que la conforman, me quedo seguramente con la más improbable, pero es así. Me encanta aquella que la relaciona con el cuento infantil de Hansel y Gretel. Os dejo tildarme de infantil.

Una obra libre y desinhibida, 
que si no habéis visitado aún, 
os invito a hacerlo ya. 


No os arrepentiréis, 
palabra de EmocionArte.

Muchas gracias por seguir enriqueciendo EmocionArte con vuestros comentarios, vuestras reflexiones compartidas.

¡Hasta pronto familia!







Comentarios

  1. Hola,
    Magnifico trabajo y redacción, además de unas fotografías hermosas. Tengo delito, no lo he visitado. Un saludo!! Buen post.

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    1. Muchas gracias Keren! Anda, ya tienes una visita pendiente. Te encantará, ya verás! Un abrazo!

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  2. Siempre me ha fascinado esta casa. La has descrito maravillosamente... Precioso paseo por ella ��

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    1. Qué bien Tere, que os hayáis hecho a la idea! Es fantástica, la verdad! Y tú también! Mil gracias por pasarte y comentar. Abrazotes! 😘

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  3. Ojalá pudiera haber sido uno de esos Batlló que habitó ese edificio, tuvo que ser una experiencia única en un momento excepcional. Silvia, te has superado con este post. La mezcla de la rigurosidad del análisis con el aire alegre de tus comentarios hace que la lectura se convierta en una actividad cultural interesante y fresca. Me ha gustado de principio a fin y he aprendido cositas que desconocía por completo. Para mí Gaudí es, como tu dices, brillante, pero sobre todo es un auténtico genio. Creo que es a la arquitectura lo que Dalí pudo ser a la pintura. Una explosión de libertad de formas y colores sin dejar de lado la expresión de una realidad contenida en la naturaleza, en el simbolismo y en la crítica. No te tildaré de infantil, claro que no, la interpretación del cuento solo es el reflejo de tu mente soñadora y creativa, que nadie te lo robe. Un beso.
    M.G. Aranguren

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    1. Qué bien que te haya resultado agradable la lectura, porque me quedó más largo de lo habitual, el post, y eso que eliminé cosillas, pero como siempre agradezco tus palabras, y que además me digas que has aprendido algo nuevo... es que ya vamos, haces que esto de escribir cobre aún más sentido. Cómo nos gustan los genios eh! Llenos de esa explosión de libertad de la que hablas. Espero que nunca nadie me robe esa mente infantil, soñadora y creativa, me encanta lo que me dices, y lo sabes! Gracias infinitas! 😘

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  4. Hola Silvia,

    Me alegra saberte de vuelta en este espacio y me emociona que lo hagas con un post tan delicado, ingenioso y brillante como éste.
    Siempre he creído que nos costaría mucho imaginarnos como sería Barcelona si Gaudí no hubiese existido. ¿Podríamos concebir un Paseo de Gracia sin sus maravillosas casas? ¿Podríamos acostumbrarnos a una Barcelona sin el Parc Güell o sin la Sagrada Família?
    Es evidente que, sin toda explosión de creatividad y esas formas tan transgresoras en su época, ahora estaríamos hablando de una ciudad completamente distinta.

    Felicidades por tan buen trabajo.
    Un fuerte abrazo.

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    1. Muchísimas gracias por tus palabras Estrella. Te prometo que mientras recababa información y empezaba a escribir el post, me hice esa misma pregunta: Qué hubiera sido de Barcelona sin Gaudí, sería una ciudad normal y corriente sin edificios destacados, sin demasiado arte en la calle, en fin que no nos gustaría tanto nuestra ciudad, seguro. Un besote! Y me alegro que estés por aquí de nuevo 😘

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  5. Hola Silvia
    Ha sido un acierto comenzar introducir la arquitectura en tu blog con la Casa Batlló y la figura de Gaudí. Es una maravillosa creación repleta de detalles e innovaciones. Sin salir de Barcelona podrás dedicar varias publicaciones.
    Un abrazo

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    1. Wenas Miguel, gracias por pasearte de nuevo por EmocionArte. La verdad es que tengo algunas otras obras arquitectónicas en mente, pero al tener esta tan cerca y gustarme tanto, creí que debía empezar por ella si o si. La verdad es que si, que en Barcelona hay muchas obras de las que podría hablar, de hecho hace poco visité con mi peque la Casa de les Punxes de Puig i Cadafalch, también modernista, pero no quumiero aburriros siempre con el mismo estilo, sabes que me gusta ir cambiando, así que habrá alguna otra sorpresita durante esta temporada, de estilo completamente distinto pero creativo igual. Digo alguna porque estos post me dan muchísimo trabajo de documentación, síntesis y darle ese toque más didáctico, pero luego disfruto como una niña escribiéndolos jajaja en fin paradojas de la vida. Un besito Miguel y gracias de nuevo! 😘

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